CARTA A MI MADRE

Carta a mi madre.

Querida madre:
Cuantas veces me dijistes que no dejara los estudios que el aprender te enriquese y tenías razón, estoy asistiendo al Centro de Adultos de Gines, es una iniciativa muy gratificante dando la oportunidad a hombres y mujeres para desarrollarse personal y culturalmente, lo que le negaron en su infancia.
Llevo pocos meses en el centro, pero me he dado cuenta que te creces como personas, recordando conocimientos olvidados y es una motivación que te lleva a seguir el camino de la enseñanza, sin duda es una tarea que realizo con entusiasmo en estos momentos de mi vida.
¿Te acuerdas cuando me decías que los maestros enseñábais a la vez que aprendíais? Pues tenías razón, mi profesora Concep lo dice a menudo.
Me gustan las clases todos los días aprendo algo nuevo, cuando hablo con la gente que conozco los animo a que retomen los estudios, que todo no es trabajar, es bonito rodearte de personas que como yo tienen la ilusión y la necesidad de aprender.
Me viene a mi memoria cuando tu me contabas como enseñabas a leer y a escribir a las muchachas que no tuvieron la oportunidad de ir al colegio, y por las tardes después de tu trabajo las reunías en tu casa y les dabas clases a cambio de la satisfacción de verlas aprender.
Ahora se conmemora los 25 años de la iniciación de los Centros de Adultos, un proyecto hecho realidad gracias al empeño de muchas personas.
Cada dia me alegro más de asistir al centro, quiero pensar que tu tienes algo que ver, ya te contaré más adelante mis progresos.
Un beso y un abrazo de tu hija que te quiere.